TEGUCIGALPA, HONDURAS. Un total de 15 departamentos de Honduras están bajo alerta verde, según lo declaró este viernes el Comité Técnico de la Comisión Permanente de Contingencias (COPECO).
El llamado a una actitud vigilante estará vigente, al menos, hasta las 3:00 de la tarde de este domingo 11 de octubre.
Los territorios que deberán tener especial precaución son: Atlántida, Islas de la Bahía, Cortés, Santa Bárbara, Comayagua, Yoro, Copán, Ocotepeque, Lempira, La Paz, Francisco Morazán, El Paraíso, Choluteca, Valle e Intibucá.
Es decir, los únicos departamentos que no están bajo alerta este fin de semana son aquellos ubicados en el área nororiental del país: Colón, Gracias a Dios y Olancho.
La razón de la alerta
Es oportuno saber que el llamado de los expertos procede a que se espera que en los próximos días se presenten lluvias y chubascos de variada intensidad; además, estarían acompañados de actividad eléctrica.
Según COPECO, esas condiciones meteorológicas serán producto de una convergencia de viento y humedad en la mayor parte del territorio nacional; el pronóstico indica que las zonas más afectadas serían el occidente y el sur del corazón de Centroamérica.
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¿Qué pasa con «Delta»?
Sobre el Huracán Delta, el Centro Nacional de Estudios Atmosféricos, Oceánicos y Sísmicos (CENAOS) informó que ya perdió circulación. Por tanto, también se disminuyó la intensidad de sus vientos, degradándose a categoría dos.
Las últimas lluvias asociadas al paso de ese fenómenos provocaron bastante humedad en el suelo hondureño; como consecuencia, el movimiento del agua podría derivar en crecidas repentinas de quebradas y ríos.
De manera específica, el Sistema de Alerta Temprana (SAT) advierte que podrían desarrollarse deslizamientos de la tierra en el occidente, centro y sur del país.
Sugerencias al pueblo
En virtud de lo anterior, las autoridades hacen un llamado a la población para que realicen una inspección de su entorno. Si encuentran grietas o fisuras grandes, la evacuación es obligatoria, dado que eso podría ser indicativo de un inminente derrumbe.
Además de la evacuación, también es imperativo que se llame al 911 para que se disponga del recurso humano necesario para controlar la situación.
Para las personas que trabajan en la construcción de zanjas y muros, COPECO recomendó que aseguren el área apuntalándola, para así evitar el riesgo de derrumbes.
Por el mismo lado, se instó a que la población evite el cruce o cualquier tipo de actividad sobre el cauce de vados, ríos o quebradas. El nivel elevado de agua puede provocar que la corriente fácilmente a una persona, incluso si se traslada a lo interno de un vehículo.
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