CORTÉS, HONDURAS. El hermano de un ciudadano colombiano, quien hace unos días murió atropellado en San Pedro Sula, denunció a medios de comunicación que lo que ocurrió fue un «asesinato» y no un accidente.
El hecho ocurrió el 1 de mayo y la víctima fue identificada como Paulo César Carranza, quien era un alto ejecutivo de una empresa multinacional.
Por lo tanto, a través de Hoy Mismo, el hermano del ahora occiso, Edward Carranza, pidió justicia y exigió que las autoridades tomaran acciones en contra de los supuestos autores del crimen.
«Mi hermano muere atropellado por el amante de su esposa en un carro que le regala mi hermano a la esposa. Lo atropellan y lo matan, lo dejan ahí tirado», dijo Carranza.
Asimismo, Carranza aseguró que antes de que atropellaran a su hermano, lo golpearon brutalmente.
«El carro lo atropella, lo matan porque el tórax se lo destrozaron completamente, parece ser que lo golpearon antes del suceso, porque la cara estaba totalmente destrozada».
El pariente del ahora occiso identificó a los supuestos responsables como Luisa Margarita Rodríguez y Óscar Méndez, su supuesto amante.
El hombre dijo que los supuestos hechores del crimen andan tranquilos como si nada hubiese pasado.
«Lo que nosotros exigimos es justicia, confiando en la justicia hondureña, que actúe rápidamente, que no sea un caso que se quede sin esclarecer. La embajada colombiana está apoyando todo el proceso. Nosotros estamos llevando un muerto para Colombia», dijo Carranza.
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Otro hecho violento
Un joven fue encontrado muerto, torturado y maniatado durante la noche de ayer, viernes, a la orilla del río Manchaguala, ubicado en la colonia San Juan Bosco en Cofradía, departamento de Cortés.
Según la información recopilada por agentes policiales, la víctima se dedicaba a la venta de helados en la zona, a bordo de un vehículo. Justamente los responsables del crimen lo habrían bajado de la unidad y lo llevaron a otro sector para quitarle la vida, informó la Policía.
Cuando las autoridades llegaron a la escena, encontraron que el cuerpo del joven presentaba signos de tortura. Además, tenía un lazo y un torniquete en el cuello.
Familiares del fallecido también se apersonaron al lugar y señalaron que él era originario del sector de Casa Quemada, pero se rehusaron a brindar la identidad a los medios de comunicación.
Los policías procedieron a acordonar y resguardar como corresponde el área. Minutos después llegaron los médicos forenses, quienes realizaron el levantamiento. Posteriormente, movilizaron el cadáver a la Morgue Judicial de San Pedro Sula.
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