Tegucigalpa.- La organización para la que es una heroína, es un admirable proyecto de educación gratuita conocido como Héroes 504 y que busca erradicar la violencia y brindarle un mejor futuro a los niños y adolescentes del país, por medio de una plataforma de apoyo a jóvenes en situación de riesgo.
Chasty Fernández, su fundadora, es una hondureña luchadora, soñadora y quien cuenta con una licenciatura en Pedagogía, otra en Psicología, un máster en educación infantil y la carrera de Astronomía en proceso.
Fernández asegura que desde sus 10 años se ha dedicado a trabajar y ayudar a sectores muy pobres, actos que señala haber aprendido de sus padres.
«Siempre me he dedicado a trabajar, me he especializado en la educación infantil y eso me ha permitido conocer todos estos sectores vulnerables que han sido olvidados, no solo en temas educativos, sino en temas muy importantes para la vida de ellos y sus familiares», dijo.
Por lo tanto, detalló que, mediante plataformas educativas, Héroes 504 comparte a los niños los conocimientos de Astronomía, Medicina, Literatura, Derecho, Música, Lenguaje de señas, Idiomas, Historia, entre otras. Esta labor la hacen a través de voluntarios de diferentes partes del mundo.
Creación y evolución
Según cuenta su fundadora, Héroes 504 nació en el 2019 en un pequeño sector del centro de Tegucigalpa con 50 niños, durante seis meses, antes de que llegara la pandemia por el coronavirus.
Del mismo modo, destacó que el proyecto está enfocado en los niños desde 5 a 18 años. Sin embargo, «con el tema del COVID-19, muchos perdieron a su familia y trabajo, entonces estamos aceptando muchachos hasta de 20 y 22 años para que puedan estudiar».
«Mientras todos los colegios y escuelas cerraron, nosotros empezamos a trabajar en varios sectores. Entonces ya no solo era Tegucigalpa, ahora también abarcamos varias regiones de Honduras», detalló Chasty.
Desde inicios de la pandemia, Héroes 504 ha logrado beneficiar a niños de zonas rurales y en riesgo social. Esto lo hacen en las zonas de La Ceiba, Cortés, San Pedro Sula, Choluteca, Nacaome y el Distrito Central.
Actualmente, este extraordinario proyecto ha cruzado las fronteras, ya que también beneficia a niños en los países de El Salvador, Costa Rica, Panamá, Guatemala, Chile, Paraguay y Colombia, contabilizando así más de 3, 600 niños beneficiados.
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Por otra parte, Chasty detalló que trabajan de forma dirigida. «Si un centro básico nos dicen que tienen mil niños, entonces una vez a la semana nos reunimos con ellos en diferentes temas».
Fernández explicó que la institución debe hacer una inscripción que es completamente gratuita. Entonces lo niños una vez a la semana se conectan 40 minutos con el «héroe» o voluntario especialista en el tema a trabajar.
Crece el número de superhéroes
Chasty recordó que, cuando inició su proyecto, comenzó con 6 «héroes», sin embargo, ahora cuentan con casi 90 voluntarios. «Los primeros llegaron cuando les planteé la idea, entonces me dijeron sí y ahora es que varios llegan y dicen yo también quiero ser un héroe».
Por otro lado, detalló que pese a la gran ayuda que brinda, no cuentan con patrocinadores, ya que todo sale por cuenta propia y apoyo de su familia.
«Yo sé que con lo que abono a un niño le estoy cambiando su vida. Entonces todo lo que tenemos es de bendición y de ayuda para cada niño de Honduras y Latinoamérica», agregó.
Héroes 504 también ha sido nominado en los premios Quetglas, los cuales destacan una labor, actividad o servicio en favor de las personas menos favorecidas, logrando de esta manera transformar y mejorar la situación de vida de personas.
En ese sentido, logró quedar entre los tres finalistas y pese a no haber ganado el primer lugar, Chasty asegura haber sido una experiencia «emocionante».
Un proyecto creíble
«Yo temblaba de la emoción, es ahí cuando te vas dando cuenta que la gente va creyendo en el proyecto y dices: estamos de verdad cambiando vidas, en realidad estamos salvando todos estos munditos y fue un honor», expresó.
No obstante, Chasty manifestó que el mayor logro está en que la gente pueda observar que están salvando vidas y así poder darse a conocer, «no por Chasty o héroes, sino por aquel niño olvidado y así poder transformarles la vida, verlos en la universidad y saber que están bien».
Finalmente, expresó que uno de sus sueños es tener un centro físico, ya que actualmente solo enseñan mediante la virtualidad.
«Necesitaremos mucha ayuda para construir este castillo de sueños y que los niños puedan cumplir y hacer realidad todo lo que ellos desean ser. Sin embargo, en este momento no tenemos apoyo, somos una organización sin fines de lucro», comentó.
Asimismo, esta valiente hondureña espera lograr ese objetivo en 5 años y que el futuro centro educativo de Héroes 504 viva abarrotado por las mañanas y tarde.
Dato: Durante su niñez, Chasty Fernández soñaba con ser monja, pues creía que solo de esa forma podría «salvar el mundo».
Frase: «La vida no es de lujos, vanidades y egos. Hay gente que en verdad la está pasando mal y lo que en verdad necesitas hacer es ayudarlos».
