TEGUCIGALPA, Honduras. – El migrante hondureño que pretende emprender “sueño americano” debe contar con al menos unos 7 mil dólares (alrededor de 150 mil lempiras) si quieren viajar con un “coyote”.
El viaje a los Estados Unidos es un sueño que cada día aumenta por parte de las personas en países como Honduras.
Por la falta de seguridad, empleo, educación y otras situaciones, miles de hondureños se ven obligados a emprender este viaje.
A expensas de lo que pueda pasar en el camino, centenares de compatriotas dejan sus hogares y su nación a diario, con el fin de lograr una vida digna para ellos y los suyos.
Los migrantes necesitan antes de todo agenciarse el dinero que se invertirá en el camino, o lo que el “coyote” les pida para llevarlos.
En ese sentido, existen dos formas que los migrantes hondureños utilizan. Una de ellas es precisamente pagarle al “coyote” para que lo lleve dentro de las fronteras norteamericanas.
Para esto, el ciudadano que pretenda viajar, debe pagar al menos los siete mil dólares (alrededor de 150 mil lempiras).
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Alrededor de esta cantidad es lo que cobra un “coyote” para llevar a una persona a los Estados Unidos de forma ilegal. Aparte de esto, el migrante debe prepararse con unos tres mil dólares para el camino.
Para esto, el ciudadano tiene que endeudarse en su país antes de la «aventura». Lo primero que hace un migrante cuando llega a trabajar a países como este, es pagar lo que se le ha prestado para irse.
Viaje a la deriva
Por otro lado, hay migrantes hondureños que deciden emprender este viaje de forma individual. O sea, sin la ayuda de un “coyote”.
Hay quienes se van a simplemente con lo que «llevan puesto», y en el camino van pidiendo para sobrevivir.
Este tipo de migrantes, son los que utilizan el temido tren, denominado “La Bestia”. Y se contabiliza que en su viaje gastan alrededor de unos 5 a 10 mil lempiras.
Asilo
Por otro lado, hay quienes tienen más fortuna y piden asilo en EEUU, a organismos de Derechos Humanos, o al mismo Gobierno.
Esto, poniendo como excusa, que están huyendo de la violencia, amenazas, o son víctimas de algunas circunstancias del país que provienen.
Pero para que esto se dé, se tiene que ir a una corte norteamericana, en donde se evalúa el caso. En un término, que se pierda el mismo, se procede a la deportación.
Además, para poder quedarse en EEUU con esta facultad, se necesita al menos una persona conocida que resida allá. Éste será responsable del cuidado del migrante.