Dolor de cabeza, náuseas e incluso el arrepentimiento son algunas de las consecuencias desagradables que deja el beber alcohol. Los beneficios tras cesar el consumo aparecen en las primeras 24 horas.
Una nueva guía elaborada por Niall Campbell, experto en adicción al alcohol del hospital Priory (suroeste de Londres, Reino Unido), revela lo que realmente sucede en nuestro cuerpo cuando se deja de beber alcohol mediante una línea de tiempo que plasma los beneficios progresivos, informa ‘Daily Mail‘.
– En 24 horas: El efecto más inmediato del exceso de alcohol es la resaca (guayabo). Puede sufrir sudoración o temblores y, en casos severos, convulsiones. Si renuncia a la bebida moderada, su cuerpo comenzará a eliminar el alcohol de su sistema dando comienzo a la ‘desintoxicación’. Su nivel de azúcar en sangre se normalizará, se sentirá mucho más lúcido, menos deprimido y tendrá más dinero en su billetera.
– En una semana: Comúnmente el alcohol va acompañado de noches con sueño intermitente. Después de unos siete días, sus patrones de sueño mejorarán.
– En quince días: El alcohol irrita fuertemente la mucosa del estómago y provoca síntomas tales como reflujo. Al dejar el alcohol, esto será cosa del pasado. Asimismo, comenzará a notar una pérdida de peso, ya que esta bebida contiene significativas calorías «ocultas» (y sin nutrientes): una copa de vino (250 mililitros) con un volumen del 13% de alcohol puede añadir 228 calorías a su cena.
– En 3-4 semanas: La alta presión arterial provocada por el alcohol comenzará a disminuir.
– En un mes: Se verá notablemente mejor. El alcohol es tóxico para el órgano más grande de su cuerpo: la piel. Las toxinas hacen que sea menos elástica y provoca su envejecimiento prematuro.
– En 4-8 semanas: Su hígado mejora y comienza a derramar el exceso de grasa. El beber en exceso provoca que se inflame, dando lugar a la llamada ‘hepatitis alcohólica’, una enfermedad silenciosa. En las primeras etapas, no se puede sentir, pero puede conducir a la cirrosis, que es permanente. Además, si usted es mujer, beber un par de copas de vino al día durante dos o tres semanas muy probablemente lleve al desarrollo del ‘hígado graso’, que ocurre cuando este órgano convierte la glucosa en grasa. El alcohol afecta la forma en que el hígado tolera la grasa, por lo que las células del hígado se llenan de esta.
– En 12 semanas: Beber en exceso hace que las células de la sangre se vuelvan más grandes y por lo tanto se canse más, porque no son capaces de transportar el oxígeno de manera eficiente a todo el cuerpo. Después de dejar el alcohol, los glóbulos rojos comenzarán a renovarse en un plazo de tres meses y se sentirá mucho más enérgico y saludable.
RT