TEGUCIGALPA, HONDURAS. La justicia de Honduras ordenó la detención judicial contra dos presuntos implicados en la masacre registrada el pasado jueves en la salida de Torre Morazán en la capital.
Los implicados son Eber Espinoza (23 años), alias «Chesi» y Erick Macías (27 años), alias «Licenciado», este último supuesto jefe de gatilleros de la MS-13.
A ambos sujetos se les acusa del delito de asesinato en perjuicio de cuatro personas y por asociación para delinquir. Tras la audiencia inicial, se programó una segunda audiencia para el próximo lunes 25 de julio de 2022, informó la portavoz de los juzgados capitalinos, Bárbara Castillo.
Macías y Espinoza ya fueron trasladados a la cárcel de máxima seguridad «El Pozo», ubicada en Ilama, en Santa Bárbara.
Según las autoridades, quien estuvo detrás de la mascare fue la MS-13, la cual presuntamente la que ordenó la muerte de las cuatros que perecieron en el atentado.
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La masacre en Torre Morazán
El crimen ocurrió en el bulevar Morazán la madrugada del jueves 14 de julio, cuando un grupo de jóvenes iba saliendo de un centro nocturno.
Sin embargo, al lugar llegaron varios presuntos sicarios que los interceptaron, los pusieron contra la pared y les dispararon. Entre las víctimas estaba Said Lobo Bonilla, hijo del expresidente de Honduras, Porfirio Lobo Sosa, quien era el objetivo del crimen.
La masacre fue condenada por muchos sectores que condenan el hecho y piden la captura de todos los responsables, autores materiales e intelectuales. Por lo delicado del caso, se mantiene bajo reservas y es poca la información divulgada.
Descartan pago a criminales
El director de la Policía Nacional, Gustavo Sánchez, desvirtuó la información que trascendió en horas de la mañana sobre que el pago para los criminales que ejecutaron el crimen.
“Es una fake news (noticia falsa) que anduvo en las redes sociales, no sabemos cuál es el origen. No tiene la autoría de las direcciones especializadas de la Policía Nacional”, detalló.
Asimismo, Sánchez explicó que dentro de las personas capturadas no se encuentra ninguna personas que tenga relación con funcionarios público.
También, manifestó que en su indagación estiman que podrían haber participado al menos 11 personas en el crimen.
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