REDACCIÓN. – Las fuerzas aéreas de los Estados Unidos y Corea del Sur realizaron este jueves un ejercicio de bombardeo con fuego real. Esto fue como reacción directa al lanzamiento esta semana de Corea del Norte de un misil que sobrevoló Japón. Asimismo, en coincidencia con el fin de las maniobras militares Ulchi- Freedom Guardian.
Los bombarderos nucleares y cazas furtivos ensayaron a 150 kilómetros de Corea del Norte. Esto, en coincidencia con el fin de las maniobras militares Ulchi- Freedom Guardian. El régimen comunista amenazó con destruir Japón tras probar un misil balístico.
Washington desplegó sus bombarderos supersónicos B-1B Lancer, con capacidad de llevar armas nucleares, y sus cazas furtivos de última generación F-35B, mientras que Corea del Sur voló sus F-15K, que ya habían realizado un ejercicio similar el día anterior.
Ensayos con fuego real
Los Lancer volaron desde Guam, mientras que los F-35 operaron desde Iwakuni, en Japón. Ahí la fuerza aérea estadounidense mantiene una importante base.
Esta fue una muestra de fuerza tras el último lanzamiento de misiles balísticos de Pyongyang. Las aeronaves lanzaron sus bombas sobre objetivos en el área de práctica de Pilseung, en la provincia de Gangwon. El sitio es a 150 kilómetros de la frontera con Corea del Norte.
«Las fuerzas aéreas de Corea del Sur y los Estados Unidos realizaron ejercicios de ataque con el objetivo de contrarrestar los repetidos lanzamientos de misiles por parte de Corea del Norte y su desarrollo de armas nucleares«, indicó un comunicado de Seúl.
Estos vuelos son habituales cada vez que aumentan las hostilidades en la Península de Corea, que técnicamente sigue en un estado de enfrentamiento bélico desde 1953, cuando la Guerra de Corea terminó con un armisticio y no con un tratado de paz.
Las maniobras más grandes en su tipo en el mundo
En este caso se realizaron independientemente de los ejercicios Ulchi-Freedom Guardian, que involucraron a 50,000 soldados surcoreanos y 17,500 estadounidenses, pero en coincidencia con su finalización este jueves.
Las maniobras, las más grandes de su tipo en el mundo, se realizan anualmente. Este año llegaron en medio de una escalada de tensiones sin precedentes en la península coreana. Lo anterior, tras una seguidilla de pruebas balísticas del régimen de Kim Jong Un.
La última situación ocurrió el martes cuando Corea del Norte lanzó un misil balístico de media distancia. Dicho misil fue diseñado para cargar una cabeza nuclear que sobrevoló el norte de Japón.
Pyongyang lo calificó más tarde de «preludio significativo» para llegar al territorio estadounidense de Guam, en el Pacífico.
Fuentes: AP, EFE y AFP