TEGUCIGALPA.-El Departamento de Estado de EE.UU. renovó la alerta a sus ciudadanos si viajan a Honduras debido a que aún prevalecen los niveles «críticamente altos» de violencia, crimen y secuestro en ese país centroamericano.
A diferencia de la última alerta de viaje a Honduras, emitida en octubre de 2015, ahora el Gobierno estadounidense no observa una reducción del crimen.
El Departamento de Estado destacó que Honduras tiene una de las tasas de homicidios más altas del mundo, de 60 por cada 100.000 habitantes, y recordó que desde 2011 han sido asesinados 37 ciudadanos estadounidenses, tres de ellos desde enero de este año.
Además, resaltó los «altos niveles de impunidad» en el país debidos a que Honduras «carece de los recursos suficientes para responder, investigar y procesar los casos de forma adecuada». Más allá de la alta tasa de homicidios, el Gobierno de Estados Unidos alertó de secuestros, extorsiones, robo de vehículos, atracos y agresiones sexuales ocurren con frecuencia.
Según la alerta de viaje, las organizaciones de narcotraficantes ejercen la violencia a lo largo y ancho del país para controlar las rutas y su negocio, mientras que las pandillas hacen lo propio en Tegucigalpa, San Pedro Sula y otras de las principales urbes.
El Departamento de Estado también alertó de la frecuencia de retenes ilegales en las carreteras del país ejecutados por criminales que se hacen pasar por miembros de la Fuerza Pública con el objetivo de cometer asaltos y robar vehículos. Estos actos ocurren, incluso, en regiones remotas como Choluteca, Olancho, Colón y Copán.
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Asimismo, el Gobierno estadounidense hizo un llamado a ejercer la cautela, especialmente de noche, en zonas turísticas que registran menores tasas de crimen, como en Roatán y el resto de islas de la Bahía.
También hizo especial énfasis en la situación que se vive en la región de Gracias a Dios, en el oriente del país, «donde hay una amenaza creíble contra ciudadanos estadounidenses por parte de grupos de narcotraficantes».