SAN PEDRO SULA, HONDURAS. El territorio hondureño desde hacía años que no sufría con la llegada de huracanes, no obstante, fue en el pasado 2020 que dos ciclones dejaron daños severos en el país.
Ahora con el inicio de una nueva temporada de huracanes, los ojos vuelven a posicionarse en Honduras. Desde aquel 26 de octubre de 1998 que ingresó al territorio catracho el huracán Mitch, los pobladores no habían visto mayor devastación.
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Este ciclón arrasó con todo a su paso, desde viviendas, cultivos, hasta trágicamente vidas humanas. Parecía que todo iba bien, Honduras se enfrentó a tormentas leves, precipitaciones que no fueron más que un «pasar de nube». Los hondureños jamás se imaginaron que volverían a revivir la pesadilla.
Entre el 01 y el 16 de noviembre, Honduras fue afectada por dos fenómenos naturales, el primero la depresión tropical Eta y luego el huracán Iota, que ingresó como tormenta tropical. Ambos generaron fuertes impactos en diversas áreas del país.
Cientos de ciudadanos quedaron afectados a raíz de estos ciclones, muchos desaparecidos, atrapados y lo más trágico: las muertes. La vivencia de los hondureños con respecto a estas tormentas representó una preocupación, pues muchos señalaron que las inundaciones se pudieron evitar, pero que «nos agarraron desprevenidos».
Ahora, con una temporada que inicia y con algunas alertas por parte de entes autorizados, la alarma se dispara en el país. Aunque algunos meteorólogos han explicado que Honduras no está a la vista de un huracán, los cambios pueden darse y de no estar preparados las posibilidades que ocurra igual que con Eta e Iota son muy elevadas, indican algunos hondureños.
Es necesario reconocer que con esta nueva temporada también se presentaría el fenómeno de «La Niña», pero ¿qué es?
«La Niña es un fenómeno climático que ocurre cuando las aguas superficiales del océano pacífico se enfrían. Esta disminución de la temperatura suele ocasionar temporadas más frías y sus efectos abarcan regiones enteras del planeta».
Población debe estar atenta
Ante ello, Diario TIEMPO Digital contactó a Carlos Canales, quien es meteorólogo del Centro de Estudios Atmosféricos, Oceanográficos y Sísmicos (CENAOS). Él explicó en primera instancia que en efecto la temporada de huracanes da inicio hoy.
Añadió que se tiene un pronóstico donde se tiene previsto que la temporada sea por encima del promedio normal, es decir, una mayor actividad, donde esperan alrededor de 15 tormentas tropicales. De esas, ocho podrían convertirse directamente en huracanes, y otros de categoría mayor.
«Esta temporada se va a extender hasta el 30 de noviembre. Así que, en los próximos meses se debe estar atentos a lo que sucede con las formaciones de ciclones, especialmente en el Caribe», afirmó.
El experto también manifestó que Honduras, siempre por estar en la trayectoria de ciclones tropicales, se encuentra en alerta. Por ello, año con año se le pide a la población estar atentos de los comunicados de las autoridades competentes, agregó.
«No se puede decir con exactitud que vamos a tener efectos directos o indirectos, como los que se tuvieron el año pasado con Eta e Iota. Honduras tendrá una temporada lluviosa al menos en algunos sectores, bastante irregular como el centro-sur», señaló.
Canales agregó que los modelos climatológicos indican que actualmente «estamos en al fase neutra», es decir, que no se cuenta con «El Niño o La Niña» hasta ahora. Sin embargo, existe la probabilidad de que se pueda formar el fenómeno de «La Niña» entre agosto y septiembre.
«Al estar con La Niña, las condiciones de lluvia se incrementarían. Los pronósticos revelan que tendremos condiciones neutras todo este año 2021», arguyó.
Opinión de otro experto
Will Ochoa declaró que «muy sinceramente año con año se les viene diciendo a las autoridades del Gobierno que se preparen para la temporada de Huracanes y al Servicio Meteorológico Nacional».
No obstante, según mencionó el experto, poco o nada les ha importado lo que ellos digan. Aseguró que «hasta que ya tienen los muertos y las inundaciones dicen a querer hacer algo, por taparle el ojo al macho, pero esto ha sido así siempre».
De igual manera externó que las autoridades competentes de alerta temprana deben actuar desde ya, en especial, con las personas que están en lugares de riesgo y aún no han sido reubicados.
«Es muy difícil predecirlo, pero ya tuvimos un ejemplo con La Niña del año pasado y hay una gran probabilidad que podamos de nuevo sufrir el impacto de uno de estos fenómenos, ya sea con tormenta tropical o huracán», determinó.
¿Cómo se preparan en Honduras?
Por otro lado, Juan José Reyes, quien es jefe de Alerta Temprana de la Comisión Permanente de Contingencias (COPECO), sostuvo que la preparación ante esta temporada de huracanes es «constante».
Indicó que están trabajando en la rehabilitación de los bordos del Valle de Sula, en reconstrucción de vados, y otras infraestructuras que sufrieron daños con Eta e Iota. De igual forma, expuso que están en «una carrera contra el tiempo» para fortalecer al personal ante cualquier alerta que se presente.
«Estamos buscando mecanismos para que no haya problemas. Estamos calibrando los pronósticos para que sean más exactos. Esperamos que no pase nada, pero lo importante es pedirle a la población que esté pendiente ante cualquier riesgo», señaló.
Cesar Quintanilla, experto en meteorología, añadió que todos los modelos meteorológicos han dado el mismo resultado, que tendremos una temporada ciclónica nuevamente atípica, por encima de la media normal.
«Incluso los pronósticos de las universidades especializadas y trabajos de agencias privadas han recibido el mismo resultado, otra temporada de huracanes que será por encima de la media normal», contó.
Quintanilla explicó que esto quiere decir que el riesgo para «nosotros en Honduras» es alto. Dijo que el territorio hondureño está en el camino de estos fenómenos.
¿Hay posibilidades de que Honduras sea impactada?
«No me cabe la menor duda, que ya sea directa o indirectamente, seremos golpeados mínimo por una tormenta o huracán», relató el experto.
Asimismo, exteriorizó que dentro de las recomendaciones a tomar en cuenta es que a nivel de las autoridades del gobierno central y los gobiernos municipales ante esta amenaza y esta alerta temprana que nos brindan, todos los pronósticos deben tomar medidas de prevención «desde ya».
«Entre estas serían los dragados de ríos con peligro de desbordamiento, educar a las personas que viven en zonas vulnerables para que puedan ser resilientes. Deben saber cómo actuar frente al anuncio del arribo de un huracán», externó.
Quintanilla además aseguró que cada persona debe tomar conciencia que Honduras está en una zona geográfica expuesta a los ciclones tropicales. Agregó que los patrones de impacto se han modificado con el cambio climático. Igualmente, expresó que las aguas cercanas a las costas ahora son más atractivas para que estos fenómenos la visiten con mayor frecuencia.
«Entonces los patrones de conducta de los ciudadanos también deben cambiar para poder sufrir menos ante las embestidas de los huracanes. De las experiencias del año anterior debemos aprender y no cometer errores que nos pueden costar pérdidas materiales y vidas», concluyó.
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