El talento, el profesionalismo y la valentía de los hondureños sigue sobresaliendo en el extranjero. Cada vez son más los hondureños que ponen el nombre de Honduras en alto, ya sea en aspectos sociales, profesionales o artísticos.
Tal es el caso de Mario Rolando Gómez Orellana, un joven hondureño que destaca en los Estados Unidos por su talento artístico en la música. Recientemente este joven de apenas 23 años recibió la medalla de oro por participar en el Bach Festival tocando piano.
La categoría en la que el hondureño recibió el reconocimiento fue la universitaria. El concurso consta de varias categorías, las cuales van desde etapas infantiles hasta profesionales.
El Bach Festival es un concurso organizado por el Festival Internacional de Piano de Seattle que se realiza cada año, con el objetivo de conocer y destacar el talento de los diferentes artistas internacionales que concursan.
Según dijo en Facebook, Mario le dedica este reconocimiento a su profesor de Piano, amigos y familiares. «Se lo quiero dedicar a mi profesor de piano, Dr. Francis Yang, y a mis amigos y familia, quienes también me han apoyado en todo», escribió.
A través de una entrevista para Diario Tiempo, dijo que esta medalla es una señal de que está haciendo las cosas bien.
«Yo, personalmente, no me siento que sea alguien especial, alguien que ha sido tocado por una varita mágica y que ahora tiene talento. Algunas personas tal vez lo puedan ver así, pero yo siempre digo que uno es hijo de sus circunstancias», manifestó.
Asimismo, dijo que no olvida sus raíces y el país de donde viene, pues eso lo motiva y lo mueve a cumplir sus metas.
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Su paso en la música
Este sampedrano incursionó en el mundo del arte musical desde los 10 años. Impulsado por su padre adquirió un gusto por este complejo instrumento.
Mario contó que a los 15 años comenzó a tomar clases en la escuela de música Victoriano López. Al mismo tiempo tenía que estudiar en el colegio, en donde cursaba el bachillerato.
En el año 2015 se graduó del colegio y en el 2017 de la escuela de música… y así comenzó su carrera como artista. «De ahí hago un par de cosas con mis amigos como bandas de jazz y rock», dijo.
Además, aseguró que tocó en orquestas importantes como la Orquesta Filarmónica de Honduras y la Orquesta Filarmónica de San Pedro Sula. También creó, en conjunto con algunos amigos, un colectivo Asociación Pianista de Honduras, la cual se dedica a hacer conciertos de música clásica en San Pedro Sula.
En el año 2019, Mario buscó oportunidades de estudio en el extranjero y a partir de septiembre de 2020 comenzó a estudiar Música y Biología en Northwestern State University en Natchitoches, Louisiana, donde está becado.
«Valoren si de verdad quieren hacerlo, sea cualquier cosa que quieran hacer. Pasa de que nos queremos dedicar a algo que no disfrutamos porque siempre está esa cultura de que si nos esforzamos van a venir los resultados y nos vamos a sentir bien al final. Eso es mentira, no sé en qué cabeza cabe que tenemos que dejar la piel para lograr los objetivos. Si uno no disfruta el proceso, dudo mucho que disfrute el resultado», manifestó.
Para este talentoso joven, regresar a Honduras es indiscutible, pues asegura que no puede dejar abandonado su país.
Asimismo, dijo que le gustaría trabajar en el Tela Marine o en Utila Coral Restoration como biólogo y como músico le gustaría trabajar en la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH) o tener su propia academia de piano.
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