SAN PEDRO SULA, CORTÉS. La ola de criminalidad y violencia en el país no se detiene, a diario se reciben denuncias de asaltos, hurtos y robos en diferentes zonas del territorio nacional.
Cansados de lo mismo, los hondureños han puesto en práctica el método de hacer justicia por su propia mano, atando, exhibiendo y linchando a supuestos malvivientes, a los cuales sometieron justo en el momento que pretendían cometer un asalto o un ilícito similar.
A continuación un resumen de los casos que causaron más revuelo:
1. El pasado mes de julio, un asalto frustrado se reportó en el bulevar que conduce hacia la La Lima. Esto, cuando un supuesto asaltante iba en un bus. Al pretender despojar a los usuarios de sus pertenencias el motorista se le enfrentó y logró sacarlo del mismo.
Estando ya fuera de la unidad y, luego de un forcejeo prolongado, el supuesto asaltante recibió una tremenda golpiza propiciada por los que observaban la escena. Cabe señalar que el ayudante del autobús resultó con una herida de bala en la pierna.
Seguidamente, una vez que los pobladores lograron controlar al sujeto, tanto él como el ayudante del bus fueron trasladados a un hospital para tratar su heridas.
2. También en la capital industrial, el pasado mes de octubre, un supuesto ladrón fue linchado y amarrado a un árbol en el bulevar Juan Pablo II.
Se trató de Judas Benhur Carrasco Centeno, de 23 años de edad.
Viajando como pasajero y portando un arma de fuego no pudo logar su cometido. Tanto el motorista, el ayudante y unos pasajeros reaccionaron enardecidos y decidieron actuar en pleno momento.
Seguidamente, se bajaron y procedieron a amarrarlo. Esto, mientras llegaban elementos de la Policía Nacional para trasladarlo.
La golpiza fue tal que lo trasladaron de emergencia al hospital Mario Catarino Rivas para brindarle atención médica.
El portavoz de la Policía Nacional, Jorge Rodríguez Montoya, aseveró que el hombre no tenía antecedentes penales. «Estoy seguro que este sujeto ha cometido varios asaltos, pero como la gente nunca denuncia, no cree en las autoridades, los casos se quedan así y siguen haciendo de las suyas», comentó.
El oficial mencionó que tras salir del Hospital Catarino Rivas sería llevado a la Fiscalía. Lo anterior, para remitirlo a los juzgados y realizarle la audiencia respectiva, «normalmente van presos, pero son penas conmutables, por eso salen rápido», aclaró.
Sobre la paliza propinada por los ciudadanos, Rodríguez Montoya puntualizó que entiende el enojo; pero si ya una persona está sometida, no vale la pena agredirla.
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3. Finalmente, el hecho más reciente, ocurrido hace tan solo dos días, tuvo lugar en Danlí.
Enojados pobladores golpearon y sometieron a un supuesto ladrón. Semidesnudo, al hombre le comenzaron a pegar con un cinturón; algunos le daban patadas y otros grababan la escena con sus teléfonos celulares.
Luego, los ‘espectadores’ dijeron «amárrenlo como garrobo» y los hombres que lo sometían así lo hicieron.
Finalmente, completamente inmóvil, un ciudadano tomó una pesada roca y se la colocó sobre la espalda, por lo que el desafortunado comenzó a tener problemas para respirar.
