EUROPA – Miles de aficionados lusos estuvieron presentes en la llegada de Portugal en el aeropuerto de Lisboa para festejar el primer título, después de conquistar la Eurocopa al vencer a Francia por 1 a 0 en la prórroga.
Ataviados con camisetas, bufandas y banderas rojas y verdes, los aficionados se agolparon en el edificio del aeropuerto Humberto Delgado y contra las vallas exteriores para ver aterrizar al avión en el que viajaban los jugadores y el trofeo, a bordo de un vuelo llamado «Champ16».
El avión, bautizado «Eusebio» en honor al mítico futbolista portugués fallecido en 2014 y con el mensaje «Juntos volamos lejos» pintado en el lateral, aterrizó en Lisboa a las 12.40 (hora local, 11.40 GMT) escoltado por la Fuerza Aérea y fue bañado con espuma roja y verde.
Los aficionados, llegados de todos los rincones del país, recibieron a los futbolistas a grito de «¡Campeones, somos campeones!» y corearon el himno nacional, mientras por megafonía sonaba el «We are the champions» de la banda británica Queen.
Desde el aeropuerto, la selección de las «quinas» se traslada al Palacio de Belém para ser recibidos por el presidente luso, Marcelo Rebelo de Sousa, que les otorgará el título de «comendador», la principal distinción civil que se puede conceder en Portugal.
La ceremonia de hoy será sólo simbólica, ya que las medallas todavía no están preparadas.
Tras la recepción con el jefe del Estado, los futbolistas recorrerán los principales puntos de Lisboa a bordo de un autobús, que pasará por la céntrica plaza de Marqués de Pombal, la Avenida Liberdade y acabará en la Alameda Dom Afonso Henriques.
En Alameda, donde durante todo el campeonato se han proyectado los partidos de la selección lusa, está instalado un escenario desde el que los jugadores dirigirán un mensaje a los portugueses.