TEGUCIGALPA, HONDURAS. El Observatorio Consular y Migratorio de Honduras (Conmigho) informó que un total de 80,855 migrantes hondureños han sido deportados desde México, Estados Unidos, Europa y Centroamérica en lo que va del año.
Según las cifras, la mayoría de los hondureños han retornado a su país desde México (41,787) y Estados Unidos (38,601). En México, el mayor número de indocumentados hondureños que se han deportado son hombres con un total de 32,759, seguido de las mujeres con 4,722. Mientras que también se han dado deportaciones de niños (2,863) y niñas (1,443).
Por su lado, en Estados Unidos han deportado en total a 19,350 hombres, 10,77 mujeres, 4,222 niños y 4,282 niñas.
Por otra parte, desde Europa, han deportado a 122 hondureños, de los cuales 119 habitaban en España, dos en Suiza y uno en Dinamarca.
Los compatriotas retornados reciben asistencia en los Centros de Atención al Migrante Retornado (CAMR) ubicados en San Pedro Sula y Omoa, Cortés.
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Violencia y pobreza, principales detonantes de migración
Según datos de organismos de derechos humanos, los menores que intentan ingresar al país norteamericano lo hacen con la intención de reencontrarse con su familia o por la violencia que habita en su país.
Mientras que, alrededor de un millón de hondureños que viven en Estados Unidos, están allí empujados por la violencia y pobreza de su nación.
Migrantes hondureños sufren frío en frontera
Cientos de personas pasan frío por las bajas temperaturas en Ciudad Juárez, México. Algunos de los afectados por el clima helado son migrantes centroamericanos y venezolanos, mientras que el resto son personas en situación de calle.
En el albergue Casa Indi, familias completas intentan arroparse con lo poco que tienen bajo toldos en el exterior del refugio y, aunque algunos sí viajaron con cobijas y chaquetas que los protegen del frío, otros solo visten ligero y piden apoyo con donación de ropa de invierno.
«Nosotros venimos desde Honduras, somos cuatro familias”, contó María Claros. Y prosiguió: “Les pedimos por favor apoyo con abrigos, guantes, gorros, porque el frío se siente como si trajera uno hielo”.
Ante el frente frío en la ciudad, las autoridades mexicanas les han pedido a los migrantes que desde hace más de un mes están en casas de campaña a la orilla del Río Bravo, línea divisoria entre México y Estados Unidos, que se resguarden en albergues públicos.
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