TEGUCIGALPA. A criterio del analista, Edmundo Orellana la prueba de fuego para los nuevos juzgados anti extorsión y anti corrupción, será la investigación del descalabro financiero perpetrado al Instituto Hondureño de Seguridad Social (IHSS).
En los próximos días o semanas, el Poder Judicial inaugurará dos nuevos juzgados especializados en diferentes partes del país, especialmente en la capital.
«Estos tribunales se pondrán aprueba con un caso y es el financiamiento con fondos del seguro social al Partido Nacional a la campaña del actual presidente», comentó en exclusiva a Tiempo Digital.
Recordó que «ese caso no ha sido judicializado y ese caso necesariamente tiene que ser conocido por esos juzgados».
Posteriormente se preguntó sí, los nuevos jueces «¿van a ellos a condenar, van ellos a actuar en esos casos?».
Sin embargo, aclaró que no pueden partir de la premisa que los jueces no van a actuar, pero «esa será su prueba de fuego».
Y comentó que es en estos casos donde se invoca la independencia judicial, «porque tradicionalmente y en este gobierno se ha visto que la independencia judicial se esfumó, no existe», indicó.
«La especialización ayuda, pero hay un problema y es la ausencia total de independencia judicial», reveló el exfiscal de la república.
Explicó que el problema que no haya independencia judicial significa que «cuando un juez vea que quien esté siendo investigado o denunciado ante su Tribunal difícilmente opere».
Edmundo Orellana: Juzgados especializados
Pero Orellana sostuvo que la creación de los juzgados es un avance porque los jueces se van a especializar en la materia.
Y destacó que hasta la fecha no ha habido esa especialización en esas materias y advirtió que «para que ellos comiencen con algún grado de capacidad de responsabilidad de manejo de las competencias». Apuntó que los nuevos jueces debieron pasar un proceso de inducción y capacitación.
«Yo asumo que la MACCIH ya lo ha impartido y si no es así vamos a tener jueces que han trabajado tradicionalmente en materia penal que viene con criterios de los delitos de sangre, hurto y robo», dijo.
Y aseveró que «para juzgar delitos de corrupción que son más sofisticados sus ejecuciones y de un criterio adicional, porque son cometidos auxiliados por la tecnología, y en algunos casos solamente pueden detectarse con conocimientos técnicos».
Finalizó que si los encargados de los nuevos juzgados no han sido capacitados pueden llegar a ser un fracaso.
