REDACCIÓN. Un obispo brasileño renunció este miércoles, tras difundirse un vídeo sexual en las redes sociales en el que aparecía alguien, que supuestamente es él, acariciando sus genitales.
El Papa Francisco aceptó la renuncia del obispo Tomé Ferreira da Silva, quien supervisaba una diócesis en el estado de Sao Paulo, Sao José do Rio Preto. A los 60 años, Ferreira está a 15 años de la edad normal de jubilación para los obispos.
Desde 2015, el Vaticano lo había investigado por otras acusaciones, incluida la presunta ignorancia de los informes de abuso sexual en su diócesis.
El Vaticano, la conferencia episcopal brasileña y la diócesis de origen de Ferreira anunciaron la renuncia, pero no proporcionaron detalles sobre la causa. Ninguno de los tres respondió a las preguntas sobre si el obispo era el hombre del vídeo.
Por otro lado, el diario Diario da Regiao informó que en una breve entrevista Ferreira confirmó que es su imagen, sin brindar más detalles.
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Tampoco respondieron a las solicitudes de comentarios o antecedentes sobre los informes de noticias que el Obispo había sido investigado previamente por el Vaticano.
Acusaciones en contra de Ferreira
Según medios en 2018 la diócesis de Ferreira fue objeto de una investigación del Vaticano debido a los caos de abuso sexual. En ese momento, citó razones personales al dejar el cargo de coordinador regional de la arquidiócesis de Ribeirao Preto.
Ferreira fue acusado en 2015 de tomar dinero de la iglesia y dárselo a su conductor, con quien supuestamente tenía una relación. Según los informes, el Vaticano inició una investigación en ese momento y negó las afirmaciones.
La velocidad con la que Francisco retiró al obispo después de que apareció el vídeo sugiere que fue la gota que derramó el vaso, dados los problemas anteriores.
El Vaticano a veces puede tardar años en investigar y sancionar a un obispo a través de una investigación exhaustiva, pero en este caso su caída se produjo pocos días después de que saliera a la luz el vídeo.
Por otro lado, el Papa nombró el miércoles como su reemplazo temporal al arzobispo Moacir Silva de Ribeirao Preto. Ferreira se suma a una lista de obispos que han caído por acusaciones de practicas sexuales inapropiadas.
