TEGUCIGALPA, HONDURAS. A raíz de las denuncias y la indignación de los usuarios de la carretera CA-5, ordenan a la Concesionaria Vial de Honduras (Covi), quitar de manera inmediata las «trampas de la muerte» que había instalado en los peajes con el objetivo de evitar la evasión del pago por ese tránsito.
En consecuencia, Leo Castellón, presidente de la Superintendencia de la Alianza Público Privada (SAPP), confirmó que “hoy enviamos una nota a la Concesionaria para que eliminara inmediatamente esos obstáculos que han puesto y que vuelvan la vía a su estado original. Entonces ya la superintendencia ha girado instrucción”.
De igual manera, Castellón destacó que las motivaciones que Covi ha expuesto para llegar a ese extremo, es por el hecho de que vehículos de carga pesada pasan sin detenerse a realizar el pago respectivo. Además, de causar daños al equipo ponen en riesgo la vida de quienes allí laboran en los peajes.
Para el superintendente, las cifras que brinda Covi es una exageración, “ellos aducen que aproximadamente nueve mil vehículos al mes cruzan la tranca sin pagar, entonces decidieron poner estos obstáculos disuasivos”.
No obstante, Castellón reconoció que hay otras soluciones que pueden tener el mismo efecto, sin poner en riesgo la integridad de las personas.
Por lo cual, criticó que «pueda ser que a los empresarios de la Concesionaria les dé pesar invertir en equipos electrónicos que con facilidad y extrema eficiencia cubren estas expectativas, pero hombre si no están dispuestos a invertir, entonces qué están haciendo allí».
Lea también: Brutales trampas: COVI coloca puyas de hierro en peaje de Zambrano
Pronunciamiento de Covi el día de ayer
David Armando Palma, gerente general de la Concesionaria Vial de Honduras (COVI), explicó el porqué de la instalación de «ponchar llantas» en unas de las casetas de peajes de mayor tránsito del país.
Como se sabe, tal decisión ha creado malestar en la población, como también a los conductores del transporte de carga pesada. Muchos de ellos manifiestan que las empresas donde laboran no se hacen cargo del peaje, y para ellos es muy costoso pagarlo.
Palma respondió «que esta ha sido una decisión tomada con el fin de salvaguardar la integridad de todos los usuarios y de todos los colaboradores que están en la estación de peajes. Lamentablemente hay algunos usuarios que han decidido no hacer el correspondiente pago natural del peaje, que está instaurado desde el 2013».
«Lo que hacen es pasar golpeando la barrera, lo cual pone en peligro por la velocidad, por la impericia, por no detenerse, a todos los colaboradores que estamos ahí». De igual forma, «a los usuarios, vendedores ambulantes o cualquier persona que pueda estar circulando por ahí», justificó Palma.
Según el gerente, estos incidentes causan daños materiales a las infraestructuras del peaje. «Y pues, lógicamente no corresponde al cumplimiento de las leyes. Es decir, hay una ley que establece que se tiene que pagar un peaje por transitar, eso es lo que corresponde y se debería hacer».
Trampas Mortales
De igual modo, Palma señaló haber visto reacciones en los medios que se ha denominado a esto como trampa mortal. «Para mi mortal es la conducción temeraria que muchos vehículos automotores de carga pesada tienen en la vía, eso ha causado accidentes muy graves».
A su vez, el ejecutivo utilizo como argumento el incidente ocurrido en la carretera al Sur, donde un vehículo cisterna se incendió causando daños. «Nosotros lo que queremos evitar que se den situaciones de peligro dentro de la carretera, esa es nuestra responsabilidad y hemos tomado una determinación para tratar de controlar esto», reiteró el gerente.
Por tal razón, para Palma esto no es un dispositivo que pueda generar un accidente, únicamente una ponchadura de llanta. «La llanta se desinflara de una manera controlada pero si el vehículo no cumple con los reglamentos y la ley, caso contrario nadie tendría algún inconveniente», concluyó.