La joven modelo brasileña Melissa Gentz sufrió una brutal paliza por parte de su expareja, el piloto de motocross y millonario Erick Bretz, que fue detenido en Tampa, Estados Unidos, luego que ella hiciera la denuncia y levantara cargos contra él por violencia de género.
Según contó la propia Melissa, el ataque de su ahora ex novio sucedió luego de que ella publicara una foto en su cuenta de Instagram; que él consideró demasiado atrevida para una mujer en pareja.
Ahora, ella decidió compartir de nuevo esa fotografía, después de que su ex novio la obligó a eliminarla. También publicó otras fotos en las que se pueden ver las graves heridas en su rostro producidas por los golpes que recibió.
Gentz le explicó a la policía que el joven de 25 años la tiró al suelo y rodeó su cuello con sus piernas para estrangularla. Después la golpeó con una botella y la tiró del pelo. Pese a que fue detenido; Bretz recuperó la libertad bajo fianza y con la prohibición de acercarse a ella.
La foto que desató la polémica
«Vuelvo a publicar esta foto porque mi ex la eliminó, dijo que las chicas que tienen novio no deberían poner fotos en las que muestren el escote. Le pido a todas las mujeres que tengan el coraje de poner fin a las relaciones violentas como la mía. Todo comenzó con quejas por mis fotos en Instagram y luego por los mensajes que recibí. Un día me agarró el pelo y me dijo que tenía que recordar que yo era la mujer en esa relación», explicó Melissa en su publicación de Instagram.
Tras volver a subir la imagen por la que fue agredida, Melissa compartió otras fotos en la que se pueden ver los moretones y coágulos producto de los golpes que recibió. Esos posteos fueron acompañados por un sentido mensaje de concientización; y de lucha contra la violencia de género.
«Se dice que todos tenemos una parte favorita de la cara. La mía es la izquierda. Lamentablemente es el que lleva los signos de la violencia. Hoy es el primer día que puedo poner un poco de maquillaje en el lado derecho. No quiero ocultar las señales de lo que me pasó porque ninguna mujer debería sentirse avergonzada o sentirse culpable por ser víctima de violencia machista», agregó.