Tegucigalpa, Honduras. Los damnificados de la colonia Guillén y pobladores de sectores aledaños están denunciando que personas sin escrúpulos se aprovechan de la tragedia para saquear las casas.
Desde que ocurrieron los primeros deslizamientos en esa colonia, muchas familias han tenido que abandonar sus propiedades para no arriesgar sus vidas.
Sin embargo, presuntos delincuentes han empezado a saquear las casas, las cuales están en su mayoría deshabitadas.
Los robos
Una fuente que prefirió mantenerse en el anonimato, le dijo a Diario Tiempo, que efectivamente ladrones se están dando un festín en la colonia Guillén.
El último robo se habría ejecutado ayer y presuntamente los «amigos de los ajeno» se llevaron hasta el techo de la vivienda.
Diario TIEMPO se comunicó con el subcomisario de la Policía Nacional de Honduras, Cristian Nolasco, quien dijo que hasta el momento no hay ni una sola denuncia de algún robo en la colonia Guillén ni de los lugares cercanos.
Asimismo, el comisionado de Policía, Miguel Martínez Madrid, informó que las autoridades policiales han logrado recepcionar algunas denuncias del problema. Sin embargo, detalló que algunas no se han formalizado, ya que han quedado como quejas en redes sociales.
«Las que hemos logrado recepcionar por parte de la Policía Nacional, se les ha dado seguimiento. Usualmente las denuncias han sido por una incursión de personas que han estado intentando robar artículos y bienes de las propiedades que han quedado abandonadas», explicó.
Difícil situación
El comisionado agregó que, debido a la situación, personas albergadas se han trasladado a la zona a supervisar sus casas de habitación. Por lo tanto, aconsejó a los afectados dejar bajo llave sus viviendas.
Ante las denuncias, detalló que se estarán realizando patrullajes en la zona y así reducir el robo de cualquier artículo en las propiedades.
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«Además de la presencia policial uniformada, se propuso que ahora efectivos de la Dirección Policial de Investigaciones (DPI) andarán circulando con vestimenta ciudadana y poder reaccionar de manera más rápida», comentó.
De igual manera, agregó que entre otras quejas recibidas se menciona que personas se meten a casas ya derrumbadas para llevarse las láminas de zinc. «Eso más bien pone en riesgo a las personas que siguen metiéndose a la zona en horas de la noche, al área que ya se derrumbó, a sustraer material de construcción, porque están arriesgando su vida».
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