REDACCIÓN. El diseñador japonés Kenzo Takada, fundador en los años 70 de la firma Kenzo, ha muerto este domingo en Neuilly-sur-Seine, a las afueras de París, a los 81 años, por una complicación tras haber contraído la COVID-19, según ha informado un portavoz de su marca de decoración K3.
El creador nión, uno de los primeros japoneses en imponerse en la escena internacional con su marca, misma que esta activa aún al día de hoy dentro del grupo LVMH. Murió en el Hospital Americano de Neuilly, a pocos kilómetros de la capital francesa.
Kenzo, reconocible por llevar siempre unas gafas de pasta negra y su corte de pelo a lo ‘garçon’, que había retocado en los últimos años manteniendo aún un estilismo muy juvenil.
Cabe mencionar que Kenzo se retiró de su firma en 1999, tras haber construido un imperio que abarca desde la ropa hasta los perfumes y otros productos de belleza.
El estilista japonés popularizó los estampados gráficos y florales que aún hoy siguen definiendo la identidad de la marca, reina de un estilo colorista y urbano, y dirigida desde julio de 2019 por el diseñador portugués Felipe Oliveira Baptista.
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Kenzo comenzó vendiendo croquis
Nacido en 1939 en Himeji, Kenzo ha presidido durante los últimos 50 años el altar de la moda por su legado en la industria. Tras graduarse en el Bunka Fashion Collegue Tokyo, se trasladó a París en 1964, donde comenzó su carrera vendiendo croquis a grandes diseñadores.
Presentó su primer desfile en 1970 en la tienda de la Galerie Vivienne que acababa de abrir, dedicada a la ropa femenina y bautizada originalmente como ‘Jungle Jap’. Más tarde le dio su propio y popularizado nombre. Trece años después añadió una línea de hombre a su marca, y poco después incluyó perfumes y decoración.
Sus estampados coloridos, su espíritu multicultural y una cierta alegría que supo introducir en la moda con sus espectaculares desfiles siguen siendo un ejemplo para los nuevos diseñadores.
El año pasado celebró su 80 cumpleaños en la capital francesa con una fiesta en la que el código de vestimenta era ir de dorado, y en la que mostró sus ganas de seguir disfrutando. En enero de este mismo año creó K3, una lujosa firma de decoración de interiores en la que ahora estaba plenamente involucrado.
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