CORTÉS. Un prestamista y su guardaespaldas fueron asesinados frente a la maquila «Zip Villanueva», zona norte de Honduras.
Se supo que los ahora oaccisos fueron atacados por sujetos que los interceptaron. Luego del ataque armado, los dos hombres fueron llevados aún con vida al Centro Médico Sampedrano (CEMESA).
Pero horas después expiraron, confirmó la Policía en la zona norte de Honduras. Los ahora occisos fueron identificados como Selim Izaguirre y René Garay.
La Policía investiga si se trató de un asalto porque acababan de pagar planilla en el parque industrial. Donde los ahora difuntos prestaban dinero y aparentemente venían de cobrarles a sus clientes.
A la escena del doble crimen llegaron elementos de la Policía para acordonar el lugar, asimismo iniciaron operativos para dar con los responsables del acto criminal.
También, se desplazaron hasta el lugar un grupo de empleados de Medicina Forense del Ministerio Público para el levantamiento de ambos cuerpos.
Asimismo, la Dirección Policial de Investigaciones (DPI) indaga si este doble asesinato tiene que ver con el trabajo del prestamista y tampoco descartan que se haya tratado de un robo.
A tiros acribillan hombre tras bajarlo de autobús
Desconocidos acabaron ayer miércoles con la existencia de un hombre. El hecho se dio en la esquina opuesta a un mercado del barrio El Centro, en esta ciudad, tras bajarlo de una unidad del transporte.
Testigos manifestaron que varios sujetos fuertemente armados descendieron de una camioneta color rojo.
Luego se dirigieron a un autobús del cual bajaron a un muchacho.
Una vez fuera de la unidad de transporte, los pistoleros obligaron al joven a ponerse de rodillas. Seguidamente comenzaron a dispararle casi a quemarropa, sin importarles que eran observados por comerciantes y otras personas que transitaban por ese sitio.
Personas que andaban a pie, así como las que se conducían en sus vehículos, se atemorizaron. Pues a pesar que la balacera duró pocos minutos, aseguraron que parecía que estaban en medio de un campo de guerra.
La víctima quedó tendida a la orilla de la pavimentada, presentando múltiples impactos de bala, quedando prácticamente irreconocible.
En la escena se halló una gran cantidad de casquillos de diferente calibre, especialmente de fusil AK-47. Tras el levantamiento de ley, el ahora occiso fue llevado a la morgue de San Pedro Sula en calidad de desconocido.