REDACCIÓN. Serena Williams hizo a un lado los sentimientos en un partido cargado de emociones. Venciendo a su hermana Venus por 6-4 y 6-4 en la final del Australian Open. Que le valió su vigésimo tercer título individual en un Gran Slam.
Serena tuvo que jugar su mejor tenis para vencer a Venus. Quién se ganó el favor del público del Rod Laver Arena con su esfuerzo.
Williams cayó al suelo, con las manos en el aire y los ojos abiertos de par en par. Con gozosa incredulidad, antes de felicitar a su hermana por inspirar su carrera en Melbourne.
«Sin Venus no existirían las Williams ni yo habría ganado ni uno solo de mis títulos», dijo, emocionada, la campeona.
«Es una persona asombrosa, no hay forma de haber ganado el vigésimo tercero sin ella», dijo Serena. Sosteniendo la Copa Memorial Daphne Akhurst en la ceremonia del trofeo.
«Ella es la única razón de la existencia de las hermanas Williams, gracias por inspirarme a ser lo mejor posible», añadió.
Serena y Venus Williams
La victoria la alejó de Steffi Graf en la lista de las ganadoras de Grand Slam. Serena está a tan sólo un título de Margaret Court, quien tiene el récord de 24 trofeos.
Por otro lado, el triunfo permite a Serena, que jugó 10 puntos directos de saque y 27 golpes ganadores. Recuperar el lunes el número uno mundial que tenía la alemana Angelique Kerber.