TEGUCIGALPA, HONDURAS. El arte y la música hondureña se encuentran de luto debido a que en el transcurso de esta semana fallecieron tres de sus grandes exponentes por problemas de salud.
Se trata de los catrachos Alejandra Mendoza, Jairo López y el inolvidable Ramón Eduardo Cedeño, mejor conocido como «Guayo«.
Los decesos generaron mucho pesar y tristeza, tanto en la sociedad en general como en el ámbito artístico. Eran personas que habían entregado gran parte de su vida al arte y la música.
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Violinista Alejandra Mendoza
Alejandra Mendoza era una joven violinista, madre y maestra hondureña. Luego de una larga lucha con una enfermedad, perdió la vida el pasado 9 de marzo, dejando un enorme vacío en su familia y el ámbito artístico.
La joven estuvo interna durante un tiempo en el Hospital Escuela. Debido a lo costoso de sus tratamientos, familiares y amigos realizaron actividades para recaudar fondos.
Tras su muerte, colegas y conocidos le dejaron mensajes en las redes sociales, lamentando la irreparable pérdida.
Mendoza fue la coordinadora del Programa OASIS de la Organización de Estados Americanos (OEA) y contribuyó en la formación musical de más de 400 niñas y niños y adolescentes de la ciudad Tela.
Clarinetista Jairo López
Entre tanto, Jairo López era un reconocido clarinetista hondureño y uno de los fundadores del grupo musical Café Guancasco. El artista hondureño falleció el pasado martes 8 de marzo por razones no especificadas.
Uno de los miembros de la misma banda dio a conocer la triste noticia. A la vez, recordó todas las experiencias vividas con Jairo y su entrega a la música y al arte en Honduras.
Jairo también se popularizó como líder político luego de los acontecimientos del Golpe de Estado en 2009. Familiares, amigos y su esposa le dedicaron unas palabras a través de sus redes sociales.
Guayo Cedeño
La última muerte ocurrió el pasado viernes 11 de marzo y fue la del inolvidable guitarrista «Guayo» Cedeño. La noticia sorprendió a los hondureños y al mundo artístico .
Guayo, como se le conocía, murió debido a una complicación respiratoria. A Guayo Cedeño se le consideraba uno de los mejores guitarristas de Honduras. Era originario de La Ceiba, departamento de Atlántida, en donde nació el 7 de enero de 1974.
Su música la compartió a nivel centroamericano con la Orquesta de la Papaya, y acompañó durante varios años a los cantautores Guillermo Anderson, fallecido en agosto de 2016, Aurelio Martínez y Karla Lara, entre otros artistas.
En la capital hondureña, Tegucigalpa, estuvo ligado al grupo musical Los Diablos Negros, fundado hace 40 años.
Fue hijo del músico hondureño del mismo nombre, quien influyó mucho en su carrera y de quien decía que era su héroe. «Guayo» produjo en 2015 su primer disco, Coco Bar, dedicado a su padre y a la música catracha.
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